Quizás
tengamos idealizados a los medios. Quizás los veamos como una serie de
instrumentos inaccesibles, que esconden detrás unos objetivos de manipulación y
desinformación, que nos llevan a fiarnos poco de ellos o al desconocimiento de
los mismos.
Detrás
de los medios de comunicación social se encuentra toda una realidad no sólo
técnica, sino social y ética. A causa de los medios de comunicación social está
naciendo un nuevo tipo de hombre y de sociedad; ellos introducen cada día con
más fuerza un nuevo tipo de civilización.
Con
esta Reflexión y Plan de Trabajo la Pastoral Obrera [Hoac, Joc] quiere
sumergirse en la incidencia de los medios de masas en la sociedad, pero más en
concreto en el mundo de los trabajadores y trabajadoras.
Pretendemos
aportar cómo el mundo obrero da respuesta a esa realidad, a través de la prensa
obrera.
Por
último, queremos ofrecer una pequeña panorámica de las publicaciones que La
Pastoral Obrera [Hoac y Joc] tiene al servicio del mundo obrero. Son más de 60
años de prensa obrera, ofreciendo la Buena Nueva del Evangelio.
Los
medios de comunicación social son don de Dios y fruto del ingenio humano. Como
cualquier realidad humana y cultural pueden ser instrumentos perversos o
extraordinarios en el avance de la cultura, la unidad y solidaridad del género
humano. Puede contribuir y participar en la continuación de la obra creadora de
Dios.
Somos
conscientes del entramado complejo que son los medios de masas. Por eso
deseamos que la prensa obrera, y en concreto nuestra publicación, sea “Buena
Noticia” para el Mundo Obrero.
Este es
un material que quiere ayudarnos a todos y todas a difundir y, vender, un
periódico, el ¡Tú! dirigido al Mundo Obrero de hoy.
Es
bueno que recordemos que los destinatarios del ¡Tú! tienen las siguientes
características: escaso nivel de conciencia, débil percepción de los problemas
que afectan al Mundo Obrero, poco hábito de lectura…; y a cristianos que apenas
han descubierto las implicaciones sociales, política y eclesiales de la vida
cristiana.
Primeramente,
presentamos una Panorámica actual de los Medios de Comunicación social.
I.-
Panorama actual de la comunicación social.
La
realidad de la comunicación social en nuestros días es de una gran complejidad.
Pasamos a esbozar las características más sobresalientes del actual panorama.
VIVIMOS
EN UNA SITUACIÓN DE “OPULENCIA COMUNICACIONAL".
Después
del trabajo, durante el trabajo, es la actividad que mayor tiempo libre se
dedica a la “participación” pasiva en los medios de comunicación social. Más de
tres horas diarias es la media de consumo televisivo por persona. Tan sólo la
programación ofrecida por las televisiones alcanza las 50.000 horas anuales,
durante las cuales emiten más de 10.000 películas.
El
consumo de medios de comunicación social es de tal calibre que ha relegado en
buena medida a la comunicación tradicional. Ha penetrado en todos los rincones
modificando los hábitos de vida. La comunicación interpersonal en las familias
ha descendido bruscamente en favor de medios como la televisión, el teléfono
móvil y sus derivados… Con frecuencia la realización de las más diversas
actividades se acompaña con un uso de los medios como “ruido de fondo”:
mientras se viaja o trabaja se escucha la radio, la televisión se mantiene
encendida mientras se realiza otra actividad…
Uno de
cada cinco españoles utiliza el teléfono móvil para hacer pagos. España se ha
convertido en el país con más «Smartphone» por habitante del mundo el 92% de
los españoles dispone de al menos uno de estos dispositivos.
En
definitiva, el avance cuantitativo experimentado en las últimas décadas por la
comunicación social, acogido por un consumo masivo de la misma, ha propiciado
un considerable cambio de hábitos en las formas tradicionales de comunicación.
Incluso se podría decir que éstas han sido colonizadas por la comunicación
social. Relegadas la comunicación personal y grupal, se ha producido un crecimiento
del individualismo que acompaña el consumo de medios.
Este
crecimiento de los medios de masas también ha producido una gran socialización
del conocimiento; en ninguna otra época de la historia como ahora se ha
dispuesto de cantidades tan ingentes de información. La apertura hacia nuevas
realidades que trascienden el entorno personal del individuo, también ha
contribuido a debilitar las estructuras intermedias de convivencia en favor de
una mayor socialización por un lado y de una mayor individualización por otro.
La
falta de jerarquización que acompaña a la transmisión masiva de información
juega a favor de la conversión de las personas en individuos atiborrados que se
encuentran saturados de respuestas pero desconocen las preguntas. El
relativismo es la consecuencia de esta práctica. La progresiva homogenización
social también es fruto de este fenómeno.
LOS
MEDIOS DE LA COMUNICACIÓN SOCIAL.
Los
medios de comunicación no son ajenos al entorno donde se desenvuelven. Los
contenidos están severamente condicionados por el contexto económico, social,
político, cultural y tecnológico. Pero es la dependencia financiera de la
publicidad el primer elemento condicionante del contenido de los medios. De
modo que para sobrevivir y obtener rentabilidad se orientan hacia la captación
de clientes para poder ofrecer en sacrificio a las empresas que mediante la
publicidad intentan vender sus productos. La publicidad se convierte de este
modo en un elemento determinante en la configuración de los contenidos de los
medios. La televisión y la radio dependen íntegramente de los ingresos
obtenidos por la publicidad, y la prensa obtiene el 60% de sus ingresos
mediante la misma.
La
dinámica de los medios se dirige, mediante la competencia, a la captación de la
mayor audiencia posible, hecho que condiciona los contenidos.
El
primer efecto de esta dinámica económica de los medios es la presencia
acuciante de la publicidad en todos ellos con sus propuestas de felicidad
basadas en la satisfacción de todos los deseos. El individuo satisfecho
mediante el consumo privado es el ideal propuesto.
La
lucha por las audiencias masivas acaba neutralizando todo aquello que dificulte
la adhesión por parte de las audiencias. De este modo se rehúye la presentación
de conflictos, todo se ofrece de un modo desproblematizado, se liman
reflexiones, se diluyen contenidos, todo se muestra fácil. Pero para que el
contenido resulte apetecible se maquilla de espectacularidad -prevalece la
forma sobre el fondo-. De modo que la competencia se establece en el terreno de
la espectacularidad ficticia. Así, hasta las mayores tragedias humanas entran
en el círculo de la espectacularidad. Todo pierde entonces su verdadero sentido
y su auténtica dimensión.
La
filosofía del triunfo, de la utilidad, del individualismo, del consumo, de la
apariencia, de la prisa, del presentismo, de la posesividad y la ambición… es
la que subyace a los contenidos de los medios de masas configurando en este
sentido la conciencia social.
LA
ACTUAL COMUNICACIÓN SOCIAL TIENE
LUGAR EN RÉGIMEN DE OLIGOPOLIO.
El
crecimiento desmedido de la comunicación social ha traído aparejada la
aparición de una poderosa industria. El proceso de avance tecnológico
experimentado en todos los ámbitos de la producción también ha tenido y tiene
su incidencia en las industrias de la comunicación social. Como consecuencia de
esta circunstancia, el proceso industrial de la comunicación social requiere
una gran concentración de capital para llevar adelante su propósito. De manera
que las pequeñas empresas son marginadas de este ámbito.
La
creación de grupos multimedia, grupos empresariales que dominan simultáneamente
medios de distinta naturaleza (prensa, radio, televisión, libros…), es otra
manifestación de la creciente concentración empresarial. En España cinco grupos
multimedia controlaban en 1992 cuotas de mercado del 40% en la prensa diaria de
información general, 84% en radio y 100% en la televisión privada. El volumen
de negocio rondaba el cuarto de billón de pesetas que supone casi el 70% del
volumen manejado por los medios privados.
Actualmente (y según datos ofrecidos por el Diario Público Cuatro) consejos de administración
controlan el 80% de las audiencias de televisión y radio.
No es
el único dato que confirma ese control. En el informe sobre la inversión
publicitaria en España del año 2013, que realizaron la compañía de control de
la inversión Arce Media y la
consultora Media Hotline, los ocho grupos citados captaron el 65 % de esa
inversión publicitaria, teniendo en cuenta que en este caso y en el ámbito del
Grupo Planeta, además de la publicidad de Atresmedia, se contabilizaba la del
diario La Razón.
Atresmedia, Prisa y Mediaset:
el monopolio de la libertad de prensa.
Tres grupos controlan el 58% del mercado de los medios de comunicación, el 60% de la audiencia y el 87% de la publicidad. Mediaset, Atresmedia y PRISA protagonizan una historia de negocios e influencia.
Tres grupos controlan el 58% del mercado de los medios de comunicación, el 60% de la audiencia y el 87% de la publicidad. Mediaset, Atresmedia y PRISA protagonizan una historia de negocios e influencia.
José Angel Hernández Duarte
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