Tenemos literatura sobrada que nos habla de las bondades del plástico como también de sus perjuicios y no vamos a centrarnos en este artículo en ello sino en citar algunas orientaciones que nos permitirán reducir considerablemente la presencia de este material en todos los espacios de la vida cotidiana y por lo tanto también de otros espacios en los que no ponemos el pie nunca o casi nunca… pero a los cuales sí llega el plástico que tiramos.
1.- EVITA.
- - “Pajitas” de plástico. Y si tuvieras que usar alguna que ésta sea metálica o de bambú (reutilizables).
- - Cápsulas individuales para el café. Utiliza café molido y haz con él el café que quieras.
- - Platos, vasos y cubiertos desechables. Utiliza los que sean de plástico duro o metálicos reutilizables.
- - Botellitas pequeñas de plástico. Emplea más bien cantimploras o bien botellas de acero; siempre serán reutilizables.
- - Productos hiperenvasados. La piel de muchas frutas y verduras son suficiente protección, no necesitan plásticos a su alrededor.
- - Envases de plástico para guardar el agua en el frigorífico o para la comida. Utiliza los de cristal.
- - Juguetes de plástico endebles. Compra los que mayor durabilidad garanticen o sean de madera.
- - Prendas de vestir plásticas. Compra aquéllas que se hayan fabricado con elementos naturales: algodón, lana,…
- - Los chicles (muchos contienen plástico y además tardan mucho en degradarse). Y si los vas a tomar que éstos estén libres de esa sustancia.
- - Pinzas de plástico. Utiliza las de madera.
- - Mecheros de plástico. Emplea cerillas.
- - Los jugos en recipientes de tetrabrik o plásticos. Fabrica tú mismo los jugos en casa.
- - Maquinillas de afeitar plásticas de un solo uso. Usa la máquina eléctrica o bien maquinillas metálicas que puedas usar siempre que quieras.
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2.- REDUCE.
- - El uso de bolsas de plástico. Lleva tu saquito de tela a la compra o bien el carrito con bolsas en su interior para poner en ellas los productos que necesites de la tienda.
- - Productos preenvasados en pequeña cantidad. Adquiere productos que se vendan a granel.
- - Comidas prefabricadas (si se pueden evitar totalmente, mejor). Cocina en casa, organiza tus tiempos para ello.
- - Basura orgánica. Utiliza los desechos orgánicos para hacer compostaje y enriquecer el suelo de tu jardín con sus componentes naturales.
- - Productos que no necesites. Compra sólo aquello que precises realmente.
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3.- REUTILIZA.
- - Presiona a los comercios para reimplantar la costumbre de “reutilizar” envases de agua, refrescos, leche,…
- - Recuperemos la práctica de nuestros mayores de llevar a los comercios los envases de cristal devolviendo el envase vacío y llevándonos el lleno pagando únicamente su contenido, no su envase.
- - Las bolsas de plástico que haya para depositar en ellas la basura (no necesitamos comprar bolsas plásticas ex profeso para ello).
- - Pañales de tela para los bebés. Evita los plásticos, por muy cómodos que éstos sean.
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4.-
TRANSFORMA.
- - Las botellas de plástico, bandejas plásticas o botes de tetrabrik para crear tus macetas en casa.
- - Botes de detergente líquido o lavavajillas,… para convertirlos en archivadores u otros elementos útiles.
- - Recorta la base de los bidones grandes de agua dejándolos con un fondo de 2 ó 3 dedos para convertirlos en plato sobre el que dejar una maceta y así recoger el agua sobrante.
- - Crea un sistema de goteo para regar tus plantas cuando vayas a pasar semanas fuera de casa.
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5.- OTRAS PRÁCTICAS.
- - Pidamos en los bares y restaurantes que nos sirvan en platos y vasos de cristal o porcelana, nunca nada en envases plásticos.
- - Elije lo que venga envasado en cristal, no en plástico.
- - Repara en todo lo posible los aparatos que se te averíen; no caigas en el “usar y tirar”.
- - Fabrica tus propios productos de limpieza naturales, no los que ya venden envasados en plástico que, además, sólo sirven cada uno para una determinada cosa o superficie.
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6.-
SÉ MILITANTE.
- - Crea conciencia sobre estas cosas en tu familia, grupo de amigos/as, ámbito tuyo de estudio, trabajo o actividad de ocio.
- - Organízate en la asociación de vecinos de tu barrio o en tu comunidad parroquial y promueve la reflexión en estos espacios sobre esto y el emprendimiento de acciones comunitarias para reducir en todo lo posible el uso del plástico.
- - Si estás en un partido político apoya las propuestas que vayan en esta línea o bien proponlas tú mismo/a.
- - Denuncia el vertido de plásticos en cualquier espacio público a través de los medios con que cuentes mediante el móvil o cámara: obteniendo imágenes o vídeos para publicarlo en las redes sociales, webs, blogs,…
- - Si estás en una organización ecologista y ya estabas en esto plenamente concienciado/a y practicando… ¡enhorabuena!; si no… aún estás a tiempo de todo.
- - Demanda a las televisiones y otros medios de comunicación programas específicos que hablen de sostenibilidad, ecología y medio ambiente, uso responsable del plástico; haz lo mismo también respecto a nuestros gobernantes y demás instituciones que tengan algo que ver con este tema.
- - Si eres padre, madre, educador en un proyecto social, maestro/a, profesor/a de instituto,… EDUCA en el uso responsable del plástico y enseña con tu ejemplo a REDUCIR el consumo, EVITAR lo que de cierto no es necesario, RECICLAR, REUTILIZAR y TRANSFORMAR lo aparentemente inservible en algo útil… así harás aún más creíble tu discurso teórico.
Hay mucho que está en nuestras manos y tenemos más capacidad de cambio de la que creemos. “Quien paga manda” ¿verdad?, entonces “según nuestros hábitos de consumo así será la oferta que los fabricantes y comerciantes ofrecerán”. Nosotros pagamos… nosotros mandamos.
Santi Catalán
santi257@gmail.com
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