sábado, 13 de abril de 2013

Vigilia de oración





Notas previas:
 Cada organización se encarga de darle vida a una de las lecturas propuestas. Es decir elegirá la canción o salmo. Compartirá un testimonio vivido o realizado por personas comprometidas en ella, siempre haciendo referencia a una de las frases que están entre comillas y elegirá un símbolo que expresen el contenido de la lectura.

ESQUEMA DE LA VIGILIA A REALIZAR EL DÍA 18 DE ABRIL
Saludo inicial: Resaltar el camino recorrido, por quién, por quiénes y para qué nos unimos.

1ª Lectura. I Corintios 12, 4-11 (REDES)
Hermanos: Hay diversidad de dones, pero un mismo Espíritu; hay diversidad de servicios, pero un mismo Señor; y hay diversidad de funciones, pero un mismo Dios que obra todo en todos. En cada uno se manifiesta el Espíritu para el bien común. Y así uno recibe del Espíritu el hablar con sabiduría; otro, el hablar con inteligencia, según el mismo Espíritu. Hay quien, por el mismo Espíritu, recibe el don de la fe; y otro, por el mismo Espíritu, don de curar. A éste le han concedido hacer milagros; a aquél, profetizar. A otro, distinguir los buenos y los malos espíritus. A uno, la diversidad de lenguas; a otro, el don de interpretarlo. El mismo y único Espíritu obra todo esto, repartiendo a cada uno en particular como a él le parece. Palabra de Dios.
Salmo o canción.
Testimonio. Referencias: "poner en el centro a las personas", "denuncia profética de un nuevo modelo de desarrollo", "enlazados por la justicia".
2ª Lectura. I Corintios 12, 12-21 (Manos Unidas)
Hermanos:
Lo mismo que el cuerpo es uno y tiene muchos miembros, y todos los miembros del cuerpo, a pesar de ser muchos, son un solo cuerpo, así es también Cristo. Todos nosotros, judíos y griegos, esclavos y libres, hemos sido bautizados en un mismo Espíritu, para formar un solo cuerpo. Y todos hemos bebido de un solo Espíritu.
El cuerpo tiene muchos miembros, no uno solo. Si el pie dijera: «No soy mano, luego no formo parte del cuerpo», ¿dejaría por eso de ser parte del cuerpo? Si el oído dijera: «No soy ojo, luego no formo parte del cuerpo», ¿dejaría por eso de ser parte del cuerpo? Si el cuerpo entero fuera ojo, ¿cómo oiría? Si el cuerpo entero fuera oído, ¿cómo olería? Pues bien, Dios distribuyó el cuerpo y cada uno de los miembros como él quiso. Si todos fueran un mismo miembro, ¿dónde estaría el cuerpo?
Los miembros son muchos, es verdad, pero el cuerpo es uno solo. El ojo no puede decir a la mano: «No te necesito»; y la cabeza no puede decir a los pies: «No os necesito.» Palabra de Dios.
Salmo o canción.
Testimonio. Referencias: "poner en el centro a las personas", "denuncia profética de un nuevo modelo de desarrollo", "enlazados por la justicia".
3ª Lectura. I Corintios 12, 26-31 (Justicia y Paz)
Cuando un miembro sufre, todos sufren con él; cuando un miembro es honrado, todos se felicitan. Vosotros sois el cuerpo de Cristo, y cada uno es un miembro. Y Dios os ha distribuido en la Iglesia: en el primer puesto los apóstoles, en el segundo los profetas, en el tercero los maestros, después vienen los milagros, luego el don de curar, la beneficencia, el gobierno, la diversidad de lenguas, el don de interpretarlas. ¿Acaso son todos apóstoles?, ¿o todos son profetas?, ¿o todos maestros?, ¿o hacen todos milagros?, ¿tienen todos don para curar?, ¿hablan todos en lenguas o todos las interpretan? Ambicionada los carismas mejores. Y aún os voy a mostrar un camino mejor. Palabra de Dios.
Salmo o canción.
Testimonio. Referencias: "poner en el centro a las personas", "denuncia profética de un nuevo modelo de desarrollo", "enlazados por la justicia".
4ª Lectura: I Corintios 13, 1-13 (Cáritas)
Hermanos: Ya podría yo hablar las lenguas de los hombres y de los ángeles; si no tengo amor, no soy más que un metal que resuena o unos platillos que aturden. Ya podría tener el don de predicción y conocer todos los secretos y todo el saber, podría tener fe como para mover montañas; si no tengo amor, no soy nada. Podría repartir en limosnas todo lo que tengo y aun dejarme quemar vivo; si no tengo amor, de nada me sirve.
El amor es paciente, afable; no tiene envidia; no presume ni se engríe; no es mal educado ni egoísta; no se irrita; no lleva cuentas del mal; no se alegra de la injusticia, sino que goza con la verdad. Disculpa sin límites, cree sin límites, espera sin límites, aguanta sin límites. El amor no pasa nunca. ¿El don de predicar?, se acabará. ¿El don de lenguas?, enmudecerá. ¿El saber?, se acabará. Porque inmaduro es nuestro saber e inmaduro nuestro predicar; pero, cuando venga la madurez, lo inmaduro se acabará. Cuando yo era niño, hablaba como un niño, sentía como un niño, razonaba como un niño. Cuando me hice un hombre, acabé con las cosas de niño. Ahora vemos como en un espejo de adivinar; entonces veremos cara a cara. Mi conocer es por ahora inmaduro; entonces podré conocer como Dios me conoce. En una palabra: quedan la fe, la esperanza, el amor: estas tres. La más grande es el amor. Palabra de Dios.
Salmo o canción.
Testimonio. Referencias: "poner en el centro a las personas", "denuncia profética de un nuevo modelo de desarrollo", "enlazados por la justicia".
5ª Lectura: Mensaje de Benedicto XVI para la Jornada Mundial de la Paz de 2009 (CONFER)
Una de las vías maestras para construir la paz es una globalización que tienda a los intereses de la gran familia humana. Sin embargo, para guiar la globalización se necesita una fuerte solidaridad global, tanto entre países ricos y países pobres, como dentro de cada país, aunque sea rico. Es preciso un «código ético común», cuyas normas no sean sólo fruto de acuerdos, sino que estén arraigadas en la ley natural inscrita por el Creador en la conciencia de todo ser humano (cf. Rm 2,14-15). Cada uno de nosotros ¿no siente acaso en lo recóndito de su conciencia la llamada a dar su propia contribución al bien común y a la paz social? La globalización abate ciertas barreras, pero esto no significa que no se puedan construir otras nuevas; acerca los pueblos, pero la proximidad en el espacio y en el tiempo no crea de suyo las condiciones para una comunión verdadera y una auténtica paz. La marginación de los pobres del planeta sólo puede encontrar instrumentos válidos de emancipación en la globalización si todo hombre se siente personalmente herido por las injusticias que hay en el mundo y por las violaciones de los derechos humanos vinculadas a ellas. La Iglesia, que es «signo e instrumento de la íntima unión con Dios y de la unidad de todo el género humano», continuará ofreciendo su aportación para que se superen las injusticias e incomprensiones, y se llegue a construir un mundo más pacífico y solidario. Palabras del Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz de 2009.
Salmo o canción.
Testimonio. Referencias: "poner en el centro a las personas", "denuncia profética de un nuevo modelo de desarrollo", "enlazados por la justicia".

Gesto simbólico común a todos: "Formar una red a partir de los lazos que cada grupo aporta".
Lectura del Evangelio: Juan 17, 21-22
En aquel tiempo, levantando los ojos al cielo, Jesús dijo: «Padre santo: para que todos sean uno, como tú, Padre, en mí y yo en ti, que ellos también lo sean en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado. También les di a ellos la gloria que me diste, para que sean uno, como nosotros somos uno». Palabra de Dios.

Intervención de Fernando López sj
Padrenuestro.
Oración final.

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